Adem es sin dudas uno de los personajes más polémicos de Nuestro Amor Eterno, la ficción turca de las tardes de Telefe cuyo título original es Istanbullu Gelin. La novela, que tiene como protagonistas a Faruk y Süreyya, transita la Tercera Temporada de la mano de nuevos personajes y situaciones cada vez más cambiantes.
Uno de los personajes que sin dudas fue teniendo más variaciones a lo largo de toda la trama fue Adem (Firat Tanis), el esposo de Dilara e hijo no reconocido de Boran. El hombre comenzó a transitar la historia con un perfil muy vengativo por lo hecho por su padre biológico, luego encontró la paz al ver en los Fikret, Faruk y Osman verdaderos hermanos; y finalmente volvió al camino de la venganza en el último tramo de la Segunda Temporada.
Todos esos giros hicieron que se terminara quedando solo, sin su madre porque se suicidó y sin su esposa que decidió abandonarlo al sentir que él no la quería realmente. Ahora comenzará un nuevo giro en su persona. Esta vez de la mano de otra mujer: Günes Köksal (Nihal Yalçin).
Ella es una mujer con un pasado muy duro. Según relató en la novela, al mismo Adem, tuvo que escapar de su casa porque su madre no la quería y su padrastro abusaba de ella. Cayó a un cabaret, donde trabajó desde muy chica haciendo la indumentaria para las chicas y estuvo a situaciones muy duras. Lejos de su pasado, este personaje ahora es empleada y mano derecha de Ülfet Kavakli (Meral Çetinkaya). La joven es muy inteligente y maneja una gran capacidad en materia de diseño, presentación y comercialización de ropa de moda. Por eso es la única amiga y mayor confidente de Ülfet, lo que le permite ser la gerente de las tiendas Pera.
Pero este personaje no es uno más sino es quien conquistará el corazón de Adem y le dará un giro a su vida. En el capítulo que se verá este miércoles, la chica tendrá un acercamiento muy especial a él y la química no tardará en darse y quedar a la vista. Será después de que él la invite a cenar a su casa.
"Voy a cocinar un platillo especialmente para tí", lanzará Adem al invitarla y luego jugará con las palabras dejando al descubierto su buen humor y ese perfil poco conocido de conquistador.
"Te preguntas de qué cueva salí, así que podrás conocer mi castillo de la edad media. Tiene 400 años", le dirá con tono jocoso a lo que ella responderá con el mismo sentido de él: "no es de la Edad Media porque hace 400 años era el 1600... ¿pero habrá cocodrilos, guardias y leones hambrientos rodeando la casa como la Edad Media?", consultará ella al momento de aceptar la invitación
La noche será espléndida y habrá un regalo muy especial que marcará los nuevos tiempos que comenzarán a correr.
